Tornea piernas y glúteos en 5 pasos



- Dile sí a la rutina

El mejor tip que te podemos dar para que tu cuerpo luzca como quieres es que seas constante, recuerda que no porque un día repongas el ejercicio del día anterior, significa que tendrás el mismo resultado.

- No dejes de lado los ejercicios pequeños
Por muy poco que parezca el esfuerzo, recuerda que todos tienen una razón de ser, tal es el caso de la elevaciones de talones. Puedes realizar 3 series de 12 elevaciones cada una para comenzar, un ejercicio fácil, rápido y que te ayudará a fortalecer piernas y glúteos.

- Hazlo en el área adecuada
Realiza ejercicios apoyándote en una base como banco, sillas o en el suelo, esto ayudaráa mantener la energía en una parte específica del cuerpo, en este caso las piernas, por ejemplo, acuéstate con las manos extendidas hacia arriba y eleva la cadera en 4 series de 10 repeticiones y manteniendo la posición por unos segundos.

- No te enchueques
Mantén la postura correcta para poder realizar el ejercicio de la mejor manera posible, si cambias la posición, puede que no ejercites lo que quieres y no obtendrás los resultados deseados.
- Ayúdate con accesorios
Agrega un poco de peso a los ejercicios para aumentar la dificultad y continuar consiguiendo los resultados que quieres, por ejemplo, cuando realices sentadillas, puedes utilizar una barra de dos kilos para ejercitarte de manera óptima.

La Dieta de las Pompis ¿Existe tal Cosa?







En el mercado de las dietas existen muchas y de todo tipo, y aunque principalmente las usamos para perder peso, muchas veces a través de ellas queremos mejorar o arreglar diferentes partes de nuestro cuerpo.


No cabe duda que la mujer latina -en reglas generales- se caracteriza por sus sensuales curvas y continuamente somos bombardeadas con imágenes de las ‘pompis’ ideales, y perfectas, algunas naturales y otras no ‘tan naturales’.
Sin embargo, si eres de las personas que no quiere llegar a un quirófano a agrandarlas o perfeccionarlas, la alimentación y el ejercicio pueden ser de gran aliado para lograr un trasero bien definido y tonificado, siempre y cuando la constancia y la paciencia formen parte de esa meta.
A continuación te presentamos una serie de consejos que pueden ser de gran beneficio no solo para esa parte del cuerpo sino para tu salud en general.

Evita los tóxicos
Una piel firme no solo es consecuencia de un régimen de ejercicios, sino de una dieta libre o baja en toxinas y rica en comidas frescas.  Evita o disminuye el consumo de cafeína, azúcares refinados, dulces, postres, frituras, cigarros y el alcohol.  De vez en cuando te puedes dar tus gustos, como el usar la regla del 90/10.  Es decir, durante la semana consume un 90% de alimentos esencialmente saludables y  el 10% restante, si deseas, te mimas con antojos de comidas, y sin exagerar.

Fibra, fibra y más fibra
Seguro has escuchado que la fibra es algo saludable.  Aparte de ayudarnos a bajar de peso, ésta es esencial para optimizar la función del sistema digestivo, como el prevenir el estreñimiento. La fibra es como un limpiador natural del cuerpo.  Existen dos tipos de fibra, la soluble y la insoluble.  Para aumentar el consumo de fibra en tu dieta, hazlo de forma paulatina, toma suficiente agua, y encuéntrala en los granos integrales, cereales, frijoles, frutas, vegetales y semillas/nueces.
Proteína: esencial nutriente
La proteína es reparadora de tejidos. Inclúyela en cada una de tus comidas (desayuno, almuerzo, cena y/o meriendas). La proteína le provee a tu cuerpo aminoácidos esenciales que ayudan a la musculatura de tu cuerpo, aparte de saciar tu apetito y mantenerte llena por más tiempo.  Procura incluir proteína al menos en 2 a 3 de tus comidas diarias, y puedes también optar por proteínas vegetales como las legumbres, nueces, quinua, entre otros.

Disminuye las calorías nocturnas
No es que las calorías consumidas en las noches sean las que necesariamente te engorden- ya que el exceso de calorías engordan sin importar a la hora en que las comas.  El problema reside en que en las noches tendemos a ser más sedentarios, y en ocasiones también empezamos a picar o comer más de lo indicado. Por lo tanto, el dicho de ‘desayuna como rey, almuerza como príncipe y cena como pobre’, puede mantenerte delgada y en forma.

¿Cuántas calorías?
Cuando el cuerpo tiene calorías de más, éste las coloca alrededor del cuerpo en forma de grasa, y en muchas circunstancias en donde no queremos. No te obsesiones necesariamente con contar las calorías, pero para que tengas una idea de las recomendaciones generales de nutrición, sigue uno de los siguientes planes:
Si mides entre 5’o” a 5’3” haz una dieta de 1,200 a 1,400 calorías (Plan A)
Si mides entre 5’4 a 5’6” haz una dieta de 1,500 a 1,700 calorías (Plan B)
Si mides entre 5’7 a 5’9” o más haz una dieta de 1,800 a 2,000 calorías (Plan C)

Plan A
Desayuno: 300 a 400 calorías
Almuerzo: 400 calorías a 500 calorías
Cena: 300- 400 calorías
Merienda: 2 de 100 calorías cada una

Plan B
Desayuno: 400 a 500 calorías
Almuerzo: 500 calorías a 600 calorías
Cena: 400 calorías
Merienda: 2 de 100 calorías cada una

Plan C
Desayuno: 400 a 500 calorías
Almuerzo: 600 calorías a 700 calorías
Cena: 500 calorías
Merienda: 2 de 150 calorías cada una

Ejercicios
Y por supuesto no te olvides de hacer ejercicios ‘localizados’, es decir, especialmente para tus pompis. Comiendo una dieta balanceada y manteniéndote activa, es posible que tu trasero se mantenga firme e inclusive con el pasar del tiempo.

Por: Claudia González MS. RD., Dietista


Preguntas para el ginecólogo


Antes de acudir a tu cita, te recomendamos escribir todas las preguntas que tienes para tu médico; no importa si sientes que son muy simples, para todo tendrá una respuesta. Así que, antes de hacer tu lista, te dejamos algunas preguntas que te serán súper útiles a la hora de llegar; recuerda agregar las tuyas.

1. Pide una rápida explicación del ciclo menstrual.
- ¿Cada cuántos días debe existir tu periodo?
- ¿Cuánto tiempo dura?
- ¿De qué color debe ser el flujo?
- ¿Los dolores menstruales son normales?
- ¿Mi periodo menstrual es correcto o hay alguna anomalía?

2. Si tienes molestias en la zona íntima, pregunta la razón de las mismas.

3. ¿Cómo se constituye el examen ginecológico más completo?

4. ¿Debo tener cuidados o algún tipo de higiene específica?

5. ¿Necesito algún tipo de vacuna?

6. ¿Tengo que hacer una exploración de rutina? Y si sí, ¿cómo se realiza?

7. Si te receta algún medicamento, siempre pregunta qué es, para qué sirve y durante cuánto tiempo lo debes tomar.

8. No te olvides de preguntar si debes regresar para una segunda consulta y cada cuánto tiempo debes hacerlo.

Agrega tus propias preguntas a la lista y estarás súper preparada para una consulta ginecológica.